Madre, tú eres la dulzura,
tus manos son la ternura,
que nos brinda protección.
Es la sonrisa tu esencia,
que marca la diferencia
al entregarnos amor.
Nos entibia tu mirada
y la paciencia es tu aliada,
esforzada en tu labor.
¡Tantas noches de desvelo!
tanta lágrima y pañuelo
¡para darnos lo mejor!
Tantas horas dedicadas
con sonrisas dibujadas
para hamacar mi soñar.
Entre besos, entre abrazos
fuiste creando los lazos
porque tú eres ejemplar.